La combinación de una bomba de calor y la energía solar, se ha convertido en uno de los sistemas más eficientes a la hora de climatizar viviendas.
Su funcionamiento permite extraer la energía calorífica del aire, agua o subsuelo de manera rentable y sin consumir mucha energía. Asimismo, la energía solar puede agregar calor y electricidad a la bomba de calor de una forma renovable y ecológica.
Por qué combinar una bomba de calor y energía solar
La combinación de una bomba de calor con energía solar ofrece la independencia energética del inmueble. De manera que, aunque permanezcamos conectados a la red eléctrica, las facturas de luz se reducirán significativamente.
La energía solar térmica ayudará a que la bomba de calor no necesite trabajar tanto para generar agua caliente, además, podrá surtirse en gran parte de la energía generada por los paneles solares, consiguiendo que no consuma tanta electricidad de la red.
Bomba de calor con paneles fotovoltaicos o térmicos
Bomba de calor y paneles fotovoltaicos
La instalación de paneles solares nos generan gran parte de la electricidad que requiere la bomba de calor para su funcionamiento, tanto en invierno como en verano.
Asimismo, la energía excedente de los paneles se pueden utilizar en otros requerimientos eléctricos de la vivienda, como aparatos, electrodomésticos y/o iluminación.
Las placas fotovoltaicas pueden trabajar a pleno rendimiento, aunque no se esté utilizando la bomba de calor, pudiendo verter la energía sobrante a la red a cambio de una compensación económica en la factura de la luz.
Bomba de calor y paneles térmicos
Esta combinación es una forma muy rentable de proporcionar agua caliente sanitaria y calefacción a la vivienda, aunque tiene un mayor rendimiento los días fríos de invierno que en verano. No obstante, la bomba de calor también puede suministrar refrigeración si se combina con un suelo radiante, por ejemplo.
Cabe destacar que, este sistema combinado compensa el trabajo de generar agua caliente, haciendo que la bomba de calor trabaje menos y se reparta el trabajo de calentar el agua, poniéndose solo en marcha cuando las placas térmicas no sean capaces de cubrir la demanda que requiere la vivienda.
Ventajas de combinar una bomba de calor con energía solar
- Reduce la huella de carbono y la dependencia de otros sistemas que emplean combustibles fósiles, ayudando a reducir el vertido de gases contaminantes a la atmósfera.
- La energía solar es gratis e inagotable, por lo cual, podemos amortizar y sacar rendimiento a largo plazo de esta instalación.
- El mantenimiento que requiere, tanto la bomba de calor como el sistema de energía solar, es económico y sencillo, permitiendo alargar la vida de los equipos por encima de los 25 años.
- Las administraciones públicas y el Estado proporcionan ayudas y subvenciones cada año para que la instalación de estos sistemas sea más asequible.
- La amortización de ambas instalaciones se consigue en unos 5 años, aunque, desde el comienzo de su utilización, se consigue rebajar las facturas.
- La instalación de este sistema combinado hace que el inmueble se revalorice.